El presidente de la Liga de Parlamentarios por al-Quds y Palestina, Sheikh Hamid bin Abdullah Al-Ahmar, afirmó hoy, lunes, que la operación Inundación de Al-Aqsa fue una respuesta natural a los ataques de la ocupación israelí contra la mezquita de Al-Aqsa, al robo de tierras palestinas, a la continua imposición de un estricto bloqueo sobre la Franja de Gaza y a la práctica de la limpieza étnica contra el pueblo palestino.

Sheikh Al-Ahmar elogió la resiliencia del pueblo de Gaza, a pesar del asalto brutal y el genocidio que lleva a cabo la ocupación israelí a través de su máquina de destrucción y asesinato, respaldada por Estados Unidos y países occidentales. Hizo un llamado a todos los componentes de la nación y a los hombres libres del mundo para apoyar al pueblo palestino y confrontar la ocupación.

Enfatizó que la continuación del genocidio es evidencia clara del fracaso del sistema internacional y de las instituciones de la comunidad internacional, así como de la complicidad de las grandes potencias con la ocupación, lo que le permite continuar con la limpieza étnica contra el pueblo palestino.

El presidente de la Liga explicó que, después de un año de genocidio, las máscaras han caído, exponiendo la duplicidad occidental y las mentiras de sus valores, afirmando que la resistencia es un derecho garantizado al pueblo palestino.

Agregó que el criminal primer ministro de la ocupación, Benjamin Netanyahu, está tratando de lograr una falsa victoria al continuar el genocidio y trasladarlo al Líbano mientras persigue una política de asesinatos, llamando a la nación árabe e islámica y a los hombres libres del mundo a apoyar al pueblo libanés.

Sheikh Al-Ahmar señaló que las declaraciones de Netanyahu sobre cambiar los mapas de la región y el rostro del Medio Oriente reflejan la visión israelí de expandir los asesinatos y agresiones contra la soberanía de las naciones.

Agradeció a todos los países y entidades que han apoyado al pueblo palestino y que han trabajado para criminalizar la ocupación y perseguir a sus líderes por sus crímenes, especialmente a la República de Sudáfrica.