El diputado Mohammad Aql, miembro del bloque del Frente de Acción Islámica en el Parlamento jordano y miembro del Comité Asesor de la Liga de Parlamentarios por al-Quds y Palestina, enfatizó la necesidad de enfrentar los desafíos actuales, particularmente las amenazas de EE. UU. de cortar la ayuda a Jordania. Subrayó la importancia de buscar alternativas económicas para garantizar que la toma de decisiones nacional permanezca independiente. Aql también llamó a estar listos para enfrentar cualquier amenaza existencial, especialmente porque Jordania considera cualquier desplazamiento forzado como un acto de guerra.

Señaló que este período marca un momento crítico en la historia de la nación, que requiere unidad y acción colectiva para contrarrestar los planes de limpieza étnica perseguidos por Trump, a quien describió como el "Shylock de nuestro tiempo". Afirmó que el pueblo palestino continúa su lucha en defensa de la dignidad árabe e islámica, como lo ha hecho durante décadas, más recientemente en la batalla de "La Inundación de Al-Aqsa", donde cayeron más de 50,000 mártires. A pesar de esto, se levantan de los escombros para reafirmar su apego a su patria. "¿Cómo podrían alguna vez aceptar el desplazamiento?" se preguntó.

Aql hizo hincapié en que "los jordanos hoy son la brújula de la nación y su espada afilada, no un rebaño de esclavos, sino leones que no temen la confrontación, listos para sacrificar nuestras vidas en defensa de Jordania."

Agregó que el diálogo parlamentario no debe limitarse al intercambio de ideas, sino que debe ir seguido de acciones internas y externas. Esto incluye la cooperación entre el parlamento y el gobierno, respaldada por un plan nacional claro que refuerce la narrativa jordana y la lleve al mundo a través de esfuerzos diplomáticos y parlamentarios.

Al concluir su discurso, Aql pidió una sesión urgente de la Unión Interparlamentaria Árabe en Ammán para discutir las conspiraciones destinadas a desplazar a los palestinos e imponer una patria alternativa. Enfatizó que este asunto requiere una postura árabe unificada y fuerte.