Abbas Zaki, miembro del Comité Ejecutivo de la Liga de Parlamentarios por al-Quds y Palestina y miembro del Consejo Nacional Palestino, declaró que las decisiones extremas del gobierno de ocupación en la Cisjordania ocupada buscan finalizar el proceso de anexión y son parte de una política racista y criminal.

En una declaración a la prensa, Zaki explicó que estas medidas están alineadas con las orientaciones de la próxima administración estadounidense bajo la presidencia de Donald Trump, que apoya la expansión de los asentamientos y busca convertir Cisjordania en un área puramente israelí. Afirmó que el gobierno de ocupación está continuando su guerra contra los palestinos a través de políticas genocidas en Gaza y desplazamiento en Cisjordania, Jerusalén y el interior ocupado.

Enfatizó que "Israel está librando una guerra fatal contra toda la geografía palestina, apuntando a la tierra, al pueblo y a la identidad palestina." Hizo un llamado a acelerar la adopción de una estrategia palestina unificada para enfrentar los planes israelíes y poner fin a la división palestina para abordar esta fase crítica que amenaza la existencia palestina y su futuro político.

Anteriormente, el Ministro de Seguridad Nacional en el gobierno de ocupación, Itamar Ben Gvir, llamó a establecer "barreras permanentes" en las carreteras de Cisjordania, afirmando que "el derecho de los colonos a la vida tiene prioridad sobre la libertad de movimiento de los palestinos."