Las autoridades israelíes ordenaron a una familia palestina abandonar sus hogares en el barrio de Sheikh Jarrah, en la zona ocupada de Jerusalén oriental, denunció hoy uno de sus integrantes.
Vinimos aquí después de nuestra expulsión en 1948 de la ciudad de Ein Karem, tras la creación del Estado judío, relató Mahmoud Salhia a la agencia oficial de noticias Wafa.
Salhia contó como hace unos meses los funcionarios del municipio intentaron convencerlo de firmar un documento según el cual, se convertiría en inquilino de la casa, pero se negó.
Wafa precisó que ayer empleados de ese organismo entregaron los papeles de desalojo bajo el pretexto de “interés público” para establecer una escuela en la zona.
Salhia explicó que su padre compró el terreno en 1967, y agregó que hace dos años los israelíes ya intentaron apoderarse del área, donde se construyeron dos casas que albergan a 12 personas, nueve de ellas niños.
“Fui desplazado una vez y no volveré a ser desplazado, y no firmaré ningún papel presentado por la ocupación (…) No saldré de mi casa, donde vivo desde 1988”, aseguró.
Wafa resaltó que más de 500 palestinos, que residen en 28 casas del vecindario, enfrentan amenazas de expulsión forzada.
Ese barrio palestino ganó notoriedad internacional por las masivas protestas de mayo último, cuando los tribunales israelíes reanudaron las órdenes de confiscación de viviendas de cuatro familias que residen allí desde hace generaciones.
La batalla legal y política en torno al caso devino símbolo sobre el futuro de esa parte de la ciudad, que los palestinos reclaman como la capital de su futuro Estado, una postura apoyada por la mayoría de los países.
Recientemente, el diario Haaretz reveló que Israel impulsa la construcción de nuevas colonias en ese territorio, en violación de las resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU.
Copyright ©2024